Los niños pueden tener una tendencia a ser egoístas porque no son lo suficientemente sensibles a las personas que los rodean. Sin embargo, no hay necesidad de preocuparse porque los padres todavía pueden enseñar a los niños cómo estar siempre agradecidos y dar las gracias.
Consulte la siguiente revisión para obtener consejos sobre cómo hacer que los niños estén agradecidos por lo que pasaron y sintieron.
La importancia de enseñar a los niños a ser siempre agradecidos
La gratitud significa estar agradecido por lo que los niños han tenido, sintieron y pasaron durante sus vidas. Al aprender esta gratitud, los niños serán mucho más felices y se sentirán lo suficiente con lo que tienen.
No solo trae felicidad, los niños que están más agradecidos tienen una actitud más positiva hacia su familia y la escuela. Por eso, es muy importante enseñar a los niños a ser siempre agradecidos.
Según lo informado por la página Greater Good Science, UC Berkeley, la gratitud incluye cuatro aspectos, a saber, los siguientes.
- Date cuenta de por qué las cosas pueden estar agradecidas.
- Darnos cuenta de por qué se nos dan o tenemos cosas por las que estar agradecidos.
- Sea consciente de lo que se siente al recibir o tener cosas.
- Muestra gratitud.
Es posible que los adultos y los niños mayores de 12 años ya se sientan agradecidos con estos cuatro aspectos. Sin embargo, es posible que los niños pequeños solo puedan cumplir algunos de los aspectos anteriores. B
De hecho, no pocas veces solo lo hacen cuando se lo dicen otras personas o sus padres.
Por lo tanto, se necesita una estrategia especial para que los niños comprendan qué es la gratitud y por qué es tan importante hacerlo.
Cómo enseñar a los niños a ser agradecidos
En general, la gratitud es la conciencia de qué o quién mejoró la vida de su hijo.
Si aprenden el lado positivo, es probable que el niño sea menos exigente o egoísta.
Además, pueden apreciar lo que ya tienen en lugar de centrarse demasiado en lo que quieren.
Aquí hay algunas formas de enseñar a los niños a ser siempre agradecidos.
1. Sorprende, pero limita las opciones
Las sorpresas pueden hacer que un niño vea algo como un regalo, no solo como un derecho. Por otro lado, no es raro que tengan demasiadas opciones, lo que les dificulta elegir, por lo que las opciones dadas no se ven lo suficientemente bien.
Por ejemplo, cuando usted y su familia se van de vacaciones, es costumbre dar a elegir a dónde irán usted y sus hijos.
Todos tienen sus propias ideas para las vacaciones, por lo que es difícil decidir qué lugar elegir.
Como resultado, la discusión sobre dónde ir de vacaciones se convierte en un campo de batalla donde sus hijos querrán que sus propias ideas se hagan realidad.
Una solución bastante eficaz y sencilla puede ser decir que tienes una sorpresa.
Unos días antes del Día D, decida un lugar que quizás su familia no haya explorado antes.
De esta manera, su hijo conoce la importancia de permanecer agradecido.
2. Enseñe a los niños su pasado
Por lo general, este método funcionará cuando su familia solía pasar por muchos problemas y se levantaba porque hizo un buen trabajo.
Por ejemplo, su bisabuela trabajó ayudando a otras personas a planchar su ropa y fue el dinero el que mantuvo a sus hijos hasta el día de hoy.
Más tarde, el hierro se convirtió en un símbolo del verdadero significado del trabajo duro.
O su esposo tuvo una infancia bastante triste y luchó mucho para mantenerse con vida a pesar de que estaba solo.
De esa manera, usted, como padre, puede recordar que lo que tienen es el resultado del arduo trabajo de su padre.
3. No mime demasiado a los niños
Como padre, por supuesto, desea brindar lo mejor para sus hijos. Sin embargo, estos mejores principios no significan que esté de acuerdo con lo que quieran y cuando quieran.
De hecho, esto puede reducir su sentido de gratitud y hacer que los niños aprecien menos las cosas que tienen.
Por lo tanto, la manera de mantener a su hijo agradecido es no malcriarlo.
Si quieren un juguete nuevo, fíjate en la última vez que le compraste un juguete a un niño y pregúntale si realmente lo necesita.
4. Anímalos a compartir
Generalmente, una forma bastante eficaz de hacer que los niños siempre estén agradecidos es enseñarles a dar algo a las personas necesitadas. Por ejemplo, compartir en un orfanato o un hogar de ancianos.
Además, también puede pedirle a su hijo que ayude a los vecinos que puedan necesitar su ayuda. Por ejemplo, pedirle al niño que lleve la porción restante de comida al vecino que vive solo.
Los niños que están dispuestos a tomarse el tiempo para participar en tales actividades de voluntariado los hacen mucho más agradecidos por la vida que tienen.
5. Dar las gracias
Una de las formas más sencillas para que los niños comprendan lo que significa estar agradecido es dar las gracias a los demás.
La gratitud se puede expresar a través de la gratitud en oraciones completas. Por ejemplo, "Gracias, mamá, por traerme el almuerzo". Trate de animar a los niños a dar las gracias a las personas que les ayudan.
Además, también debe ser un ejemplo de cuándo y cómo alguien debe dar las gracias. Contigo como su modelo a seguir, los niños harán lo mismo.
Básicamente, enseñarle a su hijo cómo ser agradecido parece fácil, pero puede ser difícil si se rinde fácilmente.
Además de recordarles que estén agradecidos, también puede ser modelos a seguir niños para hacerles saber que lo que están haciendo es algo positivo.
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