La incontinencia urinaria es una afección en la que no puede retener la orina, por lo que la orina se filtra repentinamente. Aunque es común para muchas personas, una de estas enfermedades de la vejiga a menudo hace que quienes la padecen mojen la cama, lo que causa vergüenza. Es posible que deba tomar medicamentos y seguir varias formas de tratar la incontinencia urinaria.
Hay muchas formas de tratar la incontinencia urinaria. Dependiendo de su estado de salud y gravedad, su médico puede sugerirle cambios en el estilo de vida, medicamentos, terapia o una combinación de varias formas de hacer que su orina vuelva a la normalidad.
Tratamiento de la incontinencia urinaria a través del estilo de vida.
Antes de administrar medicamentos o terapia, los médicos generalmente recomiendan a los pacientes que realicen algunos cambios en el estilo de vida. Durante las próximas semanas, es posible que se le pida que haga lo siguiente.
1.Haga una nota de micción
Tome notas en un libro pequeño que pueda llevar consigo a todas partes. Este libro tiene como objetivo registrar el tiempo que usted orina, si ha vaciado completamente la vejiga, el intervalo de tiempo entre cada viaje al baño y otra información pertinente.
En el libro, anota cosas como:
- Programa tiempo para ir al baño. Esto es para que pueda orinar con regularidad.
- Espaciar su tiempo para ir al baño. Aumente gradualmente la duración durante 15 minutos hasta que pueda orinar cada 3-4 horas.
- ¿Puedes aguantar tu pipí? Si necesita orinar antes de la hora programada, intente sostenerlo durante unos 5 minutos. Anote las quejas que experimente.
2. Mantener el peso corporal ideal
Antes de tomar medicamentos, a las personas que experimentan incontinencia urinaria generalmente se les pedirá que lleven un estilo de vida saludable. Uno de ellos manteniendo el peso. Porque el sobrepeso te hace más susceptible a la incontinencia urinaria.
Según una investigación realizada en mujeres mayores de 70 años, las mujeres con peso corporal e índice de masa corporal ideales tienen el doble de probabilidades de desarrollar incontinencia urinaria que las mujeres obesas.
Para que su índice de masa corporal siga siendo ideal, debe llevar un estilo de vida saludable como:
- caminar a paso ligero durante 30 minutos 5 días a la semana,
- reducir la cantidad de calorías que consume,
- Come más frutas y vegetales,
- evite los bocadillos dulces,
- reducir las grasas saturadas y
- Evite los alimentos procesados.
3. Limitar el consumo de todo lo que sea diurético
Las bebidas alcohólicas y con cafeína son diuréticos. Ambos aumentan los niveles de agua y sal en la orina, por lo que aumenta la producción de orina. Si bebe demasiado de esta bebida, la vejiga se llenará rápidamente y la orina puede salir repentinamente.
Los medicamentos para la hipertensión y las enfermedades cardíacas también son diuréticos, que pueden empeorar la incontinencia urinaria. Si tiene problemas de vejiga y necesita tomar diuréticos con regularidad, hable con su médico sobre cómo ajustar la dosis.
4. Hacer ejercicios de Kegel
Quizás esté un poco familiarizado con este ejercicio. Los ejercicios de Kegel pueden fortalecer los músculos pélvicos que sostienen los órganos en el área, mejorar el control de la vejiga y prevenir la pérdida de orina.
Un estudio de la Universidad de Otago en Nueva Zelanda mostró que las personas que hacían ejercicios regulares de Kegel se recuperaban 17 veces más rápido de la incontinencia urinaria. Este ejercicio también ayuda a superar la incontinencia en mujeres menopáusicas.
Los ejercicios de Kegel se pueden hacer acostado, sentado, de pie o caminando. Si es la primera vez que lo hace, es mejor hacerlo acostado con las rodillas dobladas. Estos son los pasos:
- Primero busque los músculos pélvicos inferiores de una manera como, por ejemplo, reteniendo la orina. Los músculos que sostiene se denominan músculos pélvicos inferiores.
- Apriete los músculos del suelo pélvico durante cinco segundos, luego relájese durante cinco segundos. Repita 4-5 veces, luego aumente la duración a diez segundos.
- Trate de concentrarse en tensar los músculos del suelo pélvico para obtener los mejores resultados.
- Mientras contrae los músculos pélvicos, intente respirar lentamente. No contenga la respiración y no apriete los abdominales, los muslos y las nalgas.
- Vuelva a relajar los músculos pélvicos inferiores durante 3 segundos.
- Repita tres veces al día, cada una de 3 a 10 repeticiones.
5. Yoga
Los movimientos de yoga no solo son beneficiosos para los músculos del cuerpo, sino también para los músculos del área de la vejiga. Si estos músculos son fuertes, la vejiga ciertamente puede acomodar la orina de manera óptima para controlar la necesidad de orinar.
Las posturas de yoga recomendadas para la salud de la vejiga generalmente involucran los músculos pélvicos, la cintura y ambos muslos. Intente consultar a un terapeuta de yoga para encontrar los movimientos que mejor se adapten a sus necesidades.
Uso de medicamentos para tratar la incontinencia urinaria.
Si las mejoras en el estilo de vida no funcionan, su médico le sugerirá que tome medicamentos o terapia hormonal. Este método no alivia directamente la incontinencia urinaria, pero restaura la función de la vejiga a la normalidad.
A menudo se utilizan los siguientes fármacos y hormonas.
1. Fármacos anticolinérgicos y alfa agonistas
En la incontinencia urinaria, los músculos de la vejiga se contraen con más frecuencia, lo que hace que tenga ganas de orinar con frecuencia. Los medicamentos anticolinérgicos pueden tratar la incontinencia urinaria al relajar los músculos de la vejiga.
Los fármacos de esta clase incluyen oxibutinina, tolterodina y solifenacina. Los tres funcionan muy bien en la vejiga, pero existen posibles efectos secundarios como sequedad de boca, estreñimiento y visión borrosa.
El fármaco más nuevo que se administra ahora a los pacientes es el merbegron. Merbegron es un fármaco agonista alfa con un modo de acción diferente. Sin embargo, su función sigue siendo relajar la vejiga. Menos efectos secundarios, pero pueden provocar un aumento de la presión arterial.
2. Terapia hormonal
La incontinencia urinaria relacionada con la menopausia se puede tratar con terapia hormonal estrogénica. Esta hormona fortalecerá las paredes de la vagina, el cuello de la vejiga y la uretra. De esa manera, la función del sistema urinario vuelve a la normalidad y la orina ya no se filtra.
Terapia de estimulación eléctrica
La terapia eléctrica se usa cuando el medicamento tiene poco efecto sobre la incontinencia urinaria. También llamado terapia de neuromodulación, este método utiliza corrientes eléctricas de bajo voltaje a lo largo de las mismas vías que la inervación del cerebro y la vejiga.
Hay dos tipos de terapia de estimulación eléctrica, a saber:
1. Estimulación percutánea del nervio tibial (PTNS)
PTNS es una terapia simple para restablecer la conducción nerviosa entre el cerebro y la vejiga. El truco, el médico insertará una pequeña aguja en la planta de su pie. Esta aguja es un electrodo que sirve para conducir la electricidad.
La electricidad fluirá desde el dispositivo a los nervios de las piernas y luego continuará hacia los nervios del área pélvica. Esta señal le da una orden a la vejiga para que no se contraiga. Todo el procedimiento dura 30 minutos y debe repetirse hasta 12 veces.
2. Estimulación del nervio sacro (SNS)
El SNS funciona estimulando los nervios sacros ubicados en la parte inferior de la columna. La estimulación en esta área corrige las señales entre el cerebro y la vejiga con la función principal de evitar que la vejiga sea hiperactiva (vejiga hiperactiva).
Su espalda baja estará unida a una especie de cable pequeño. Estos cables ingresan a los nervios sacros y controlan las señales que van a la vejiga. Si es necesario, el cable se puede implantar de forma permanente para restaurar y mantener la salud de la vejiga.
Cirugía para controlar el flujo de orina
En casos graves de incontinencia urinaria, los cambios en el estilo de vida, los medicamentos o la terapia eléctrica por sí solos no son suficientes. Es posible que necesite varios tipos de medicamentos a la vez o cirugía para mejorar la función de la vejiga.
Hay varios procedimientos quirúrgicos que se pueden realizar, que son los siguientes.
1. Instalación honda vejiga
Honda es un dispositivo médico que se coloca en el área pélvica para tratar la incontinencia urinaria. Este dispositivo actúa como un cojín que sostiene la vejiga. Cuando se instala correctamente, honda puede tratar la incontinencia en los próximos años.
2. Cirugía de suspensión del cuello de la vejiga
Este es un procedimiento quirúrgico para tratar la pérdida de orina en las mujeres. Esta cirugía mayor tiene como objetivo levantar el cuello de la vejiga hacia el hueso púbico. Al ajustar la posición de la vejiga, su función puede volver a la normalidad.
3. Inserción de esfínter artificial
Al final de la vejiga, hay un esfínter (un músculo en forma de anillo) que regula el flujo de orina. Si hay una alteración o disminución de la función del esfínter, esto provocará una descarga de orina no deseada.
Un esfínter artificial puede reemplazar la función de un esfínter original debilitado. Una vez que la vejiga comienza a llenarse, todo lo que necesita hacer es activarla para que la orina salga con un flujo controlado.
4. Uso de dispositivos médicos
Para algunas personas con incontinencia urinaria, es posible que la mejor opción no sea la medicación, la terapia o la cirugía. El uso de dispositivos médicos puede ser más apropiado o considerado seguro. Estas herramientas incluyen:
- catéter urinario de tipo catéter permanente o catéter intermitente,
- dispositivo de recogida de orina fuera del cuerpo,
- productos absorbentes como pañales, compresas o tampones para adultos, así como
- pesarios vaginales, que es un dispositivo especial para sostener la vejiga.
5. Cirugía de remodelación de la vejiga
Esta es una cirugía mayor para tratar la incontinencia urinaria que es realmente rara y complicada. Hay dos tipos de cirugía, a saber, la cirugía para ensanchar la vejiga para aumentar su capacidad y la cirugía para restablecer el flujo de orina.
La incontinencia urinaria es un trastorno urinario que se puede tratar con cambios en el estilo de vida, medicamentos, terapia y cirugía. Las causas son muy diversas, por lo que primero debe consultar con su médico para determinar el tratamiento adecuado.